A two fold story

El imperio entra por la palabra.
José Antonio Alonso

No es por ser majadero, pero sip. Supongo que los romanos tenían sus maneras de hacer sentir a los griegos que ellos mandaban. Mire usté, los romanos tenían una liga de fútbol a la que llamaban La liga mundial de fútbol. Lo gracioso es que sólo jugaban romanos. Hmm. Tenían campeones mundiales en tal o cual cosa, eran la mejor armada del mundo, los mejores soldados, los más chéveriguay, lo último de los muñequitos. Había que hoderse con los homanos.
:-)
Y al final, pues nada, también pasaron los romanos. Nos dejaron mucho, sin lugar a dudas.

A mí me pareció una ciudad no muy espectacular cuando fui, a Roma digo. Las italianas se ven mejor en las revistas que hablan sobre las italianas. Los italianos, pues no sé, supongo que estarán bien. La ciudad es hermosa aunque un poquito sucinha. Viejísimos edificios, damas elegantes, meseros amables, un capuccino buenísimo. Si en algo son capos estos ragazzos es que han podido convencernos mediante la palabra, tornando la percepción en realidad. Umberto el Eco sabe mucho de eso y ha escrito más aún. Lo importante, lo verdadero es lo que percibimos. De eso nos casi han convencido. El emperador preguntó alguna vez, "¿Vas a creer lo que ven tus ojos o a mí?". Pues hay gente que piensa que hay café en Italia, vaya usté a saber... .bueno.
Eso
con el Imperio contra Taca. Nosotros somos Taca y ustedes saben quienes son la fuerza oscura.
Me van a deportar témome.
Cambio y fuera.

Aldo Iván Rodríguez © 2005 Todos los derechos reservados.